Decidí dejar este semi proyecto por la paz, pero no sin enseñarles el resultado final. Quería hacer un EP, que tentativamente llevaba por título “All Your Songs Point North”, pero anoche me di cuenta de que ya tenía las herramientas para continuar con mi proyecto más importante: Stabilimentum.
Dicho eso, no pude dormir bien de la emoción, pero tenía que darle conclusión a lo anterior. Así que les presento esto en forma de “sencillo”.
Ahora sigue un largo proceso que, con suerte, terminará en Stabilimentum Vol. 3: Movement Nilofer.
¡Ta-da! Eye Contact se lleva los honores este año con una pieza que, aunque es caótica, es accesible en estándares de Gang Gang Dance. Lo dicen al comienzo de la primera canción del álbum “It’s everything time”, porque verdaderamente lo es.
La salida de la banda de Tyondai Braxton, el vitual líder de Battles, fue un golpe duro para el futuro de este conjunto de math-rock. Tyondai, vocalista y multi-instrumentalista, les dejó una dirección muy característica con Mirrored. Battles decidió no reemplazarlo e hicieron bien. Dave Konopka, John Stanier e Ian Williams supieron acomodarse perfectamente a ese espacio vacío.
Ya sé lo que están pensando, ¿más jazz japonés? Así es. Hay algo que es culturalmente rompe-cerebros con todo esto del jazz nipón; esto es que en Japón los jazzistas pueden hacerse superestrellas pop; Pueden ir a presentar sus discos en programas de variedades – y no miento, esto verdaderamente sucede. Imaginen por un momento prender sus televisores y en lugar de hallar un programa como, .. eh.. digamos, La Voz (¿?), encontrar a un cuarteto de verdaderos talentos haciendo lo que mejor saben hacer.
Raro año es cuando Omar Rodriguez-Lopez no saca un disco. Pero eso no importa, sus hermanos Marfred y Marcel Rodríguez-Lopez, junto con Matthew Wilkson y Marcos Smith grabaron un discazo que nos hace olvidar a ese megalómano boricua. Curiosamente, Rico Rodríguez-López, otro de los hermanos, se unió también a la banda. Así que no se sorprendan si encuentran similitudes entre Zechs Marquise y The Mars Volta.
Grails es de las bandas más consistentes que conozco… o quizás me impresiono muy fácilmente con lo que hacen. Lo único cierto es que Grails posee un sonido sui generis, los reto a hallar a alguien como ellos. Pero si no los conocen, déjenme describírselos: Grails es un cuarteto de Portland, Oregon, cuyas influencias musicales principales se encuentran geográficamente del otro lado del mundo. Pero no, esto nunca podría considerarse del giro del “world music”. Esto es rock.
The Kills se tomó un descanso de tres años en lo que Alison Mosshart hacía su desmadrito con Jack White y compañía en The Dead Weather. Es posible que en ese tiempo aprendió lo que es “tener actitud”, ya que para Blood Pressures, Alison se dedica a patear traseros – es desafiante y es sensual.
Después de la belleza que fue el primer disco de Fleet Foxes, la palabra “fleetfoxear” se volvió parte de mi vocabulario común. Fleetfoxear no implicaba solamente escuchar canciones de estos chalados: Fleetfoxear era sentir como resonaban esas armonías vocales en masa, en días en los cuales la introspección era necesaria. Y así.
Jazz, math, post-rock, progresivo. Todos estos son adjetivos con los que los incrédulos quieren catalogar a Charts and Maps, una banda de California que derrama talento e inventiva. En un universo en el que la concepción popular del prog se divide en “lo que hacían en 1970” y “los guitar gods atascados”, Charts and Maps no embona en ninguna. 
